PRUEBAS Y CONTROLES DE CALIDAD
Las características técnicas de los relojes Panerai, históricamente diseñados para su uso en las condiciones más extremas, se someten de forma continua a pruebas y controles de calidad estrictos para garantizar unos estándares incluso superiores a los que establece la normativa del sector.
Todas las inspecciones han sido concebidas para garantizar la máxima fiabilidad y duración de cada reloj Panerai, ya sea en condiciones ambientales estándar o bien al interactuar con agentes externos que pueden resultar perjudiciales, como por ejemplo golpes, desgaste, temperaturas extremas, ácidos, radiación ultravioleta y campos magnéticos.
Un reloj que, en un principio, fue creado para su uso por submarinistas profesionales, debe ser completamente hermético al agua. Para superar las pruebas correspondientes, todos los relojes Panerai deben contar con una hermeticidad superior en más de un 25% a los límites declarados, desde un mínimo de 3 bares hasta un máximo de 250 bares (equivalente a una profundidad aproximada de 2.500 metros), en el caso de los modelos Submersible diseñados para resistir las condiciones más extremas.
Los estrictos estándares aplicados por Panerai en sus pruebas incluyen la prueba de la "gota de agua", una de las más sencillas a las que se somete la maquinaria sofisticada pero, al mismo tiempo, una de las más reveladoras. Este prueba consiste en calentar la caja y colocar una gota de agua fría o un elemento externo frío en la superficie del cristal que protege la esfera.